Cuaderno de Viajes

viernes, 9 de marzo de 2012

On 15:32 by ernest in     1 comment

Después de estar dos días en el bonito pueblo de Ella, nuestra ruta se dirige al sur, en busca de las playas tropicales de Sri Lanka. Teníamos dudas sobre cual playa escoger, Tangalla, Mirissa, Unawatuna o Hikkaduwa, y al final escogimos Unawatuna por su proximidad a la ciudad fortificada de Galle (4 kms), y también porque hay un arrecife de coral que protege la playa de los embates del océano Indico y asegura el baño en aguas relativamente tranquilas.
Nos ha sorprendido saber que durante muchos días al año en muchas de las playas de Sri Lanka el mar está tan violento que no te puedes meter en el agua. Al menos en la playa de Unawatuna eso no pasa porque está protegida, y Ulawatuna también tiene una infraestructura turística de cierta importancia. A pesar de que el tsunami del 2004 destrozó el lugar, se han esforzado en reconstruirlo, y ya no quedan trazas de aquel desastre, como mucho alguna placa conmemorativa en recuerdo de la gente que fallecio aquí.
Para llegar hasta allí teníamos un dilema: Ella es un pueblo pequeño que no tiene terminal de autobuses, y nos habían advertido que si cogemos el autobús de largo recorrido, el Intercicy a Galle proveniente de Nuwara Eliya, con toda probabilidad no tendría asientos libres.
La alternativa sería retroceder 20 kms hasta Happutale y coger un autobús en la terminal, donde tienes la oportunidad de pillar un asiento mientras el autobús no arranca. Eso es lo que hemos hecho siempre que hemos podido (una vez están en marcha, los autobuses se llenan enseguida).
Pero esta vez nos da pereza retroceder y estar una o dos horas más de viaje, así que nos armamos de valor y decidimos tomar el Intercity de las 10 de la mañana. Al menos a ésta hora nos dio tiempo a desayunar un buen curd (mató) con miel y frutas. Sabíamos que nos enfrentábamos a unas siete horas de viaje en autobús, y seguramente muchas de ellas de pié.
Y cuando pasó el intercity, efectivamente iba lleno, fue bastante difícil meter las mochilas, y nosotros nos metimos como pudimos, aquí veis la ocupación normal de los autobuses en Sri Lanka, yo estoy por el fondo, pero no se me ve entre tanta gente.
Blanca “sólo” tuvo que estar de pié tres horas, y yo cinco, pero al final llegamos sin mayor contratiempo a nuestro destino playero en el sur de la isla.
Como ya se acerca el final de nuestro viaje, deseamos estar unos cinco o seis días por aquí para descansar a fondo antes de regresar a España, así que nos hemos propuesto buscar un buen hotel en ésta playa, para disfrutar del sol y el descanso.
Regateamos en los dos hoteles de mejor categoría que vimos. No hay mucho turismo, y el Milton Resort, que es el más grande nos hace un descuento porque le aseguramos cinco noches de estancia. y ahora no tienen mucha ocupación. Su precio normal son 11.800 Lkr y nos lo dejan a 6.300 (unos 40 euros), incluyendo desayuno, aire acondicionado, televisión satélite y agua caliente.
En el Su´N Sea Beach, un Resort similar nos ofertan 6.500 Lkr la noche, casi el mismo precio, pero nos decidimos por el Milton porque es más espacioso y tiene acceso directo a la playa.
La verdad es que el Hotel está muy bien, y aunque nos está costando una pasta (según los estándares de Sri Lanka) no nos duele porque lo estamos disfrutando a fondo estos días.
Al día siguiente nos fuimos a dar una vuelta a Galle, que por lo visto es la ciudad habitada más antigua de este país. Fuimos en tuk-tuk y regresamos en bus, y el paseo fue de lo más bonito. La ciudadela se visita andando en dos horas como mucho, nosotros comimos en un bonito restaurante en una calle de su interior y pasamos medio día allí.
Al regresar, tuvimos una espléndida puesta de sol, y decidimos ir a cenar a la playa cercana, en un restaurante en la arena, caro, pero bueno.
Y al día siguiente más de lo mismo, playa, sol, agua y arena.
También volvimos a Galle para intentar comprar billetes de tren hasta la capital, pero resulta que desde el 1 de septiembre está interrumpido el tráfico de trenes por obras de mantenimiento en la vía, así que tendremos que seguir en autobús, Lástima, nos apetecía cambiar de medio de transporte.
Ya llevamos tres días estupendos aquí en la playa, probablemente lo alargaremos tres días más, aquí se está de fábula chicos, este hotel es súper majo. La única pega es que la conexión wi-fi es regular, y solo hay en el restaurante y no en la habitación, por lo demás, ¡esto es vida!
Ahora ya os tenemos al día de nuestras andanzas asiáticas, así que estaremos tres o cuatro días
sin actualizar el Blog, porque este post seguirá siendo actual,,, estaremos en la playa al igual que ahora, je,je,je,,,
Ya os contaremos la visita a Colombo, la capital, cuando pasemos por allí.
Hasta entonces, un saludo a todos!

1 comentario :

  1. Bueno, al menos las 3 y 5 horas de pie en el autobus os llevaron a un sitio guay. Me encanta la playa y la relajacion esta garantizada ahi.
    Un besito.

    ResponderEliminar