Bromo II

Hoy nos hemos levantado pronto con nuestros amigos Iván y Marta para ver la salida del sol (4.00 A.M) y siguiendo las indicanciones deldía anterior de Unai, nos perdimos enseguida, en realidad nos metimos entre campos de cebollas, y tuvimos que ver la salida del sol desde la misma cresta de la caldera, con Cemoro Labuang a nuestros pies. A pesar de no haber llegado donde esperábamos, fue muy bonito igualmente, porque tuvimos la suerte de tener un día despejado, y ver el cielo iluminando poco a poco los volcanes, fue muy bonito.

Una vez que hubo salido el sol, decidimos remontar por la carretera por donde van los jeeps con turistas en busca del mirador del volcán Semeru, que se ve detrás del Bromo si estas lo suficientemente elevado. En sólo una media hora llegamos al parking de jeeps, donde dejan a los turistas para que sigan subiendo (aquí nos dimos cuenta que la excursión en jeep que nos ofrecieron en el pueblo el día anterior era efectivamente una “turistada”, te acercan muy poco,unos 3km que puedes andar perfectamente, yaun así te falta lo más duro, que es subir las cuestas empinadas finales.

Nosotros subimos un poco más, ya teníamos perfectamente a la vista el Semeru, y tomamos unas cuantas fotos. Vimos de nuevo a Javi y Ainoa, que opinaban lo mismo con respecto al paseíto en jeep, charlamos un ratito y luego nos bajamos al pueblo para estar puntuales a las 9.30 hrs en la furgoneta que nos tenía que bajar de nuevo a Probolingo (nos había venido a buscar el día anterior un conductor que parecía majo y nos ofreció bajarnos por 25.000idr cada uno).

En realidad el conductor nos vino a buscar a las 9,00 horas, se dio una vuelta por el pueblo a ver si pillaba algún turista más (no los había, todos ya tenían el viaje pactado de antemano, como nosotros) y nos paró en el centro del pueblo, esperando no se sabe muy bien qué.

Ya empezamos!, pensamos todos nosotros… efectivamente a las 9,30 no hizo ningún ademan de arrancar, y ya pasada casi media hora ya nos dijo que tenía que llenar el autobús con 10 personas,,,pero que si le pagábamos el doble nos bajaba ya mismo y todo el rollo que se traen... En ese momento Blanca y Marta se enfrentaron ya con mala leche al conductor, y el accedió a bajarnos ya mismo, pero recogiendo a otra gente en el camino, lo cual nos parecía bien. Total que llegamos aProbolingo a eso de las 11.50, y allí decidimos “putear”un poco al conductor diciéndole que no teníamos dinero para pagarle y que las mujeres habían ido a buscarlo a un cajero, haciéndole esperar, como él había hecho con nosotros.

En realidad las chicas habían ido a buscar el billete de autobús a Yogyakarta con transbordo en Surawaya, pero como el autobús no tardaba en salir, nos tuvimos que marchar y tardamos demasiado poco en pagar al conductor según mi gusto y el cabreo que llevábamos todos.

En fin, tampoco tuvimos mucha suerte con el autobús, porque la estación de transbordo de Surawaya noes nada fácil, suerte que nos ayudó un chico que viajaba con nosotros y hablaba inglés. Nos llevó directamente al autobús de Yogyakarta, que salía a los cinco minutos, la pena es que el billete que habíamos comprado en la taquilla de Probolingo no servía para ese autobús, que era muy majo. Nos habían vendido un billete para un autobús de clase inferior (ya no compro másbilletes en taquilla si puedo evitarlo!!).

Bueno, pues a pagar billete de nuevo toca, y a esperar a llegar a Yogyakarta a eso de las 01,00 horas. Encontramos un taxi que nos cobró el precio “normal” para turistas a esas horas y conseguimos llegar a la calle de los mochileros de la ciudad, en la que despertamos a la encargada que nos ofreció un par de habitaciones al grupo muy monas, y a precio barato.

El día siguiente en la ciudad, ha sido de lo más tranquilo, nos hemos despertado tarde, nos hemos conectado por internet y hemos charlado con una señora alemana que esta en este hotel. Hemos hecho planes para el día siguiente, Marta e Iván se han ido a comprar el billete de avión a Kuala Lumpur (aquí acaban su viaje ellos) y nosotros hemos ido a información y turismo a conseguir un plano. Luego hemos ido a la peluquería, yo me he pelado y Blanca se ha puesto el tinte y después de un pequeño paseo por Malioboro Street, hemos ido a cenar con Iván, Marta y nuestra nueva amiga alemana, y luego a dormir.

Precio guesthouse 90.000 por noche y es muy chulo. Esta super bien decorado.

Precio de dos tintes (El de Ernest y el mio) y corte de pelo con moto 145.000 rupias (unos 11 euros todo).