De la montaña al mar

Hoy no hemos levantado temprano y después de despedirnos de la simpática chica de la guesthouse nos hemos ido un par de horas al jardín botánico de Candikuling hemos estado solos durante la visita, y solamente al salir hemos visto a otros visitantes al irnos. La impresión: más que un jardín botánico es una montaña ajardinada pero aun así la visita ha valido la pena.

Luego nos hemos acercado al mercado del pueblo, muy animado, donde un pillo vendedor de relojes nos ha soltado aquello de  “más barato que en Andorra” muy bien pronunciado, era muy simpático, y a pesar de que nos ofrecía garantía (¿) al final no le hemos comprado nada, pero le hemos dado una propinilla por las risas que nos hemos dado.

Y muy cerca del mercado está el templo de Pura Ulun danau bratan , muy famoso, del siglo XVII y de culto hinduista-budista. Este templo es el que sale en todos los prospectos de propaganda turística. La verdad es que nos ha gustado mucho pero se nos ha hecho corto, ya que aparte del templo no había nada más.

 

Hemos seguido con la ruta prevista y la siguiente parada ha sido en unas cascadas preciosas donde de paso hemos aprovechado para comer. Lo que más nos ha llamado la atención es la cantidad de tiendas que hay en relación al número de turistas. Después de llenarnos la tripa con un arroz que ha hecho las delicias a Ernest hemos proseguido por la sinuosa, torturadora y matadora carretera llena de baches hasta Tulambel que es nuestra parada final por hoy.

Aquí Blanca ha decidido quedarse en el Hotel Toraja , a pie de carretera, muy mono, con A.C y agua caliente, y Ernest ha ido en busca del famoso “Liberty”, un barco hundido cerca de la costa. Pasado el tiempo se ha convertido en refugio de corales y peces, y acuden a el todos los buceadores de la zona. Siguiendo las indicaciones del amable y simpático dueño del hotel (es un checo casado con una balinesa que se hace entender con todos los europeos), la he encontrado sin dificultad.

Una vez en el agua he flipado con la cantidad de peces visibles, el agua es muy clara y rebosante de vida. He encontrado el pecio a la primera, aunque se vé solo una parte, el casco del barco se ha partido en varios grupos yo sólo he llegado a ver la popa, con tres vigas suspendidas  que ya casi están totalmente colonizadas por corales. Por lo visto el grupo de restos principal está más alejado de la orilla, y he pasado de intentar buscarlo (en el medio no se llega a ver nada, por la profundidad).

Después he visto un grupo de unos 20 o 30 peces grandes, de  un metro cada uno, más o menos,,, iban nadando lentamente y he podido seguirlos un buen rato,,, daban golpes al coral con su fuerte boca para alimentarse, luego otros peces escarbaban en el mismo sitio por si quedaba algo mas,,, me ha encantado,,, pero con lo que he flipado realmente ha sido cuando me he encontrado de golpe con una pared de peces plateados a un metro de distancia. Un banco de peces de unos 2000 ejemplares de dos palmos cada uno!!, y lo que es más, me han permitido incorporarme al grupo!! He estado nadando unos 20 minutos rodeado de miles de ejemplares!!

Una experiencia fantástica, de las mejores de una vida, todavía alucino con ello!, qué bonito ha sido!!.

Y después de esto, poca cosa más, a ver un capítulo de Águila roja en el hotel, que nos hemos traído el neetbook.